Regalo de vida
4/14/2014
Regalo de vida
Romanos 6:23 Rom 6:23 Porque la paga del pecado es muerte; mas el don de Dios es vida eterna en Cristo Jesús Señor nuestro. El placer y el provecho del pecado no merecen ser llamados fruto. Los pecadores no están más que arando iniquidad, sembrando vanidad y cosechando lo mismo. La vergüenza vino al mundo con el pecado y aún sigue siendo su efecto seguro. El fin del pecado es la muerte. Aunque el camino parezca placentero e invitador, de todos modos al final habrá amargura. El creyente es puesto en libertad de esta condenación, cuando es hecho libre del pecado. Si el fruto es para santidad, si hay un principio activo de gracia verdadera y en crecimiento, el final será la vida eterna, ¡un final muy feliz! Aunque el camino es cuesta arriba, aunque es estrecho, espinoso y tentador, no obstante, la vida eterna en su final está asegurada. La dádiva de Dios es la vida eterna. Y este don es por medio de Jesucristo nuestro Señor. Cristo la compró, la preparó, nos prepara para ella, nos preserva para ella; Él es el todo en todo de nuestra salvación. La vida eterna es un regalo de Dios. Si es un regalo, no podemos ganarlo ni pagar por él. Sería insensato recibir un regalo por amor y ofrecer pagarlo. El que recibe un regalo no puede comprarlo. Lo correcto cuando se nos ofrece un regalo es aceptarlo con agradecimiento. Nuestra salvación es un regalo de Dios, no algo que hemos hecho nosotros (Eph_2:8-9). El nos salvó por su misericordia, no por lo que hayamos hecho (Tit_3:5). Debemos aceptar con acción de gracias el regalo que generosamente Dios nos dio. Mision de Cristo en la tierra
4/10/2014
Mision de Cristo en la tierra
Conversion: Salmos 51:13 Entonces enseñaré a los transgresores tus caminos,Y los pecadores se convertirán a ti. Quienes se arrepienten verdaderamente de sus pecados, no serán avergonzados al reconocer su arrepentimiento. También instruye a los demás sobre qué hacer y qué decir.Cuando Dios perdona nuestro pecado y restaura nuestra relación con El, queremos alcanzar a otros que necesitan este perdón y esta reconciliación. Mientras más haya sentido el perdón de Dios en su vida, más deseará hablar de ello a los demás. En este tiempo de semana Santa, donde se celebra la muerte y resurresion de Cristo, muchos son los que se acercan a Dios, pero solo por un momento. este acontecimiento que cambio la hoistoria de la humanidad no es algo que pase de moda con el tiempo, es algo que debe permanecer en el hombre eternamente, porque para dar vida eterna murio Cristo. Juan 5:24. Segun el Auxiliar biblico porta voz el lenguaje de la sanvacion tiene 15 acontecimiento que el hombre recibe cuando viene al conocimiento de Cristo para recibir la salvacion: Conversion, arrepentimiento, redencion, regeneracion, imputacion, adopcion, remision, rescate, justificacion, santificacion, propiciacion, reconciliacion, conservacion, origen y glorificacion. Cuando el hombre viene a Cristo se reconoce como pecador, se arrepiente, y acepta todo esto que la Biblia habla es libre de condenacion y recibe la vida eterna. No te conforme a esta vida
4/9/2014
No te conforme a esta vida
Romanos 12:1-2 Habiendo terminado el apóstol la parte de su carta en que argumenta y prueba diversas doctrinas que son aplicadas prácticamente, aquí plantea deberes importantes a partir de los principios del evangelio. Él ruega a los romanos, como hermanos en Cristo, que por las misericordias de Dios presenten sus cuerpos en sacrificio vivo a Él. Este es un poderoso llamado. Recibimos diariamente del Señor los frutos de su misericordia. Presentémonos; todo lo que somos, todo lo que tenemos, todo lo que hacemos, porque después de todo, ¿qué tanto es en comparación con las grandes riquezas que recibimos? Es aceptable a Dios: un culto racional, por el cual somos capaces y estamos preparados para dar razón, y lo entendemos. La conversión y la santificación son la renovación de la mente; cambio, no de la sustancia, sino de las cualidades del alma. El progreso en la santificación, morir más y más al pecado, y vivir más y más para la justicia, es llevar a cabo esta obra renovadora, hasta que es perfeccionada en la gloria. El gran enemigo de esta renovación es conformarse a este mundo. Cuidaos de formaros planes para la felicidad, como si estuviera en las cosas de este mundo, que pronto pasan. No caigáis en las costumbres de los que andan en las lujurias de la carne, y se preocupan de las cosas terrenales. La obra del Espíritu Santo empieza, primero, en el entendimiento y se efectúa en la voluntad, los afectos y la conversación, hasta que hay un cambio de todo el hombre a la semejanza de Dios, en el conocimiento, la justicia y la santidad de la verdad. Así, pues, ser piadoso es presentarnos a Dios. Viviendo en el Espíritu
4/8/2014
Viviendo en el Espíritu
Romanos 8:1-9 Los creyentes pueden ser castigados por el Señor, pero no serán condenados con el mundo. Por su unión con Cristo por medio de la fe, están seguros. ¿Cuál es el principio de su andar: la carne o el Espíritu, la naturaleza vieja o la nueva, la corrupción o la gracia? ¿Para cuál de estos hacemos provisión, por cuál somos gobernados? La voluntad sin renovar es incapaz de obedecer por completo ningún mandamiento. La ley, además de los deberes externos, requiere obediencia interna. Dios muestra su aborrecimiento del pecado por los sufrimientos de su Hijo en la carne, para que la persona del creyente fuera perdonada y justificada. Así, se satisfizo la justicia divina y se abrió el camino de la salvación para el pecador. El Espíritu escribe la ley del amor en el corazón, y aunque la justicia de la ley no sea cumplida por nosotros, de todos modos, bendito sea Dios, se cumple en nosotros; en todos los creyentes hay quienes responden a la intención de la ley. El favor de Dios, el bienestar del alma, los intereses de la eternidad, son las cosas del Espíritu que importan a quienes son según el Espíritu. ¿Por cuál camino se mueven con más deleite nuestros pensamientos? ¿Por cuál camino van nuestros planes e ingenios? ¿Somos más sabios para el mundo o para nuestras almas? Los que viven en el placer están muertos, 1 Timoteo v, 6. El alma santificada es un alma viva, y esa vida es paz. La mente carnal no es sólo enemiga de Dios, sino la enemistad misma. El hombre carnal puede, por el poder de la gracia divina, ser sometido a la ley de Dios, pero la mente carnal, nunca; esta debe ser quebrantada y expulsada. Podemos conocer nuestro estado y carácter verdadero cuando nos preguntamos si tenemos o no el Espíritu de Dios y de Cristo, versículo 9. Vosotros no estáis en la carne, sino en el Espíritu. Tener el Espíritu de Cristo significa haber cambiado el designio en cierto grado al sentir que había en Cristo Jesús, y eso tiene que notarse en una vida y una conversación que corresponda a sus preceptos y a su ejemplo. La Biblia, nuestro patron
4/4/2014
La Biblia, nuestro patron
Romanos 15:4-6 Las Escrituras se escribieron para que nosotros las usemos y nos beneficiemos, tanto como para aquellos a los que se dieron primeramente. Los más poderosos en las Escrituras son los más doctos. El consuelo que surge de la palabra de Dios es lo más seguro, dulce y grandioso para anclar la esperanza. El Espíritu como Consolador es las arras de nuestra herencia. Esta unanimidad debe estar de acuerdo con el precepto de Cristo, conforme a su patrón y ejemplo. Es dádiva de Dios, y dádiva preciosa es, por la cual debemos buscarle fervorosamente. Nuestro Maestro divino invita a sus discípulos y los alienta mostrándose a ellos manso y humilde de espíritu. La misma disposición debe caracterizar la conducta de sus siervos, especialmente la del fuerte para con el débil. El gran fin de todos nuestros actos debe ser que Dios sea glorificado; nada fomenta esto más que el amor y la bondad mutuo de los que profesan la religión. Quienes concuerdan en Cristo, bien pueden concordar entre ellos. El conocimiento de las Escrituras influye en nuestra actitud hacia el presente y el futuro. Cuanto más sepamos de lo que Dios hizo en el pasado, mayor será la confianza que tengamos acerca de lo que hará en los días venideros. Debiéramos leer la Biblia con diligencia para incrementar nuestra confianza en el hecho de que la voluntad de Dios es lo mejor para nosotros. Aceptar el señorío de Jesús en todos los aspectos de nuestra vida significa vivir sus valores y su perspectiva. Así como nos interesa el punto de vista de Jesús sobre la autoridad de las Escrituras, la naturaleza del cielo y la resurrección, también debemos asumir su actitud de amor hacia los demás cristianos (tener un "mismo sentir"). A medida que crecemos en fe y conocemos mejor a Jesús, llegamos a ser más capaces de mantener cada día esta actitud de amorosa unidad. Una esperanza viva
4/3/2014
Una esperanza viva
1Pedro 1:3-6 El término renacer se refiere al nacimiento espiritual (regeneración), el acto del Espíritu Santo de llevar creyentes a la familia de Dios. Jesús empleó este término cuando le explicó a Nicodemo lo que es la salvación (véase Juan 3). ¿Necesita usted aliento? Las palabras de Pedro ofrecen gozo y esperanza en tiempos de problemas, y él basa su confianza en lo que Dios está haciendo por nosotros en Jesucristo. Se nos llama a una esperanza viva de la vida eterna (1.3). Nuestra esperanza no es solo futurista; la vida eterna empieza cuando creemos en Dios y nos unimos a su familia. Por mucha aflicción o prueba que estemos pasando en la vida, sabemos que no es nuestra experiencia definitiva. Finalmente viviremos con Cristo para siempre. La esperanza de los hijos del Dios vivo es una esperanza viva; no sólo acerca de su objeto, sino también en su efecto. Vivifica y consuela en todas las angustias, capacita para enfrentar y superar todas las dificultades. La misericordia es la fuente de todo esto; sí, gran misericordia y misericordia múltiple. Esta bien cimentada esperanza de salvación es un principio activo y vivo de obediencia en el alma del creyente. El tema del gozo cristiano es la memoria de la felicidad puesta por delante. Es incorruptible no puede acabarse; es una fortuna que no se puede gastar. También es incontaminada lo que significa su pureza y perfección. Inmarcesible porque no es más o menos placentera a veces, sino siempre la misma, no cambia. Todas las posesiones de aquí están manchadas con defectos y fallas; aún falta algo: casas lindas que tienen preocupaciones tristes revoloteando en torno a sus techos dorados y bien pintados; camas blandas y mesas llenas, a menudo con cuerpos enfermos y estómagos revueltos. Dichosos aquellos cuyos corazones pone el Espíritu Santo en esta herencia. Dios no sólo da gracia a su pueblo, pero lo preserva para gloria. Cada creyente siempre tiene algo en que puede regocijarse grandemente; esto debe demostrarse en el semblante y la conducta. El Señor no aflige por gusto aunque su sabio amor suele asignar pruebas agudas para mostrar el corazón de su pueblo y para hacerles el bien al final. El oro no aumenta por ser probado en el fuego, se vuelve menos; pero la fe se afirma y multiplica por las tribulaciones y aflicciones. El oro debe perecer al final y sólo puede comprar cosas perecederas, mientras la prueba de fe será hallada para alabanza, honra y gloria. Esto debe reconciliarnos con las aflicciones presentes. Busquemos entonces creer en la excelencia de Cristo en sí y de su amor por nosotros; esto encenderá un fuego tal en el corazón que lo elevará en un sacrificio de amor hacia Él. La gloria de Dios y nuestra propia felicidad están tan unidas que si ahora buscamos sinceramente una, obtendremos la otra, cuando el alma ya no esté más sujeta al mal. La certeza de esta esperanza es como si los creyentes ya la hubieran recibido. Varon de dolores
4/2/2014
Varon de dolores
Isaias 53:3 Despreciado y desechado entre los hombres, varón de dolores, experimentado en quebranto; y como que escondimos de él el rostro, fue menospreciado, y no lo estimamos. En ninguna otra parte del Antiguo Testamento, como en este capítulo, se profetiza tan clara y plenamente que Cristo debía sufrir y luego entrar a su gloria. Pero a esta fecha pocos disciernen o reconocen el poder divino que va con la palabra. Se desecha el informe más importante y auténtico de la salvación a través del Hijo de Dios por los pecadores. La condición vil a que se sometió y su manifestación al mundo no concuerdan con las ideas del Mesías que los judíos se habían formado. Se esperaba que viniera con pompa; en cambio creció como una planta, silenciosa e inadvertidamente. Él nada tenía de la gloria que uno hubiera pensado hallar en Él. Toda su vida fue no sólo humilde en estado externo; también fue penosa. Hecho pecado por nosotros, vivió la sentencia a la cual nos expuso el pecado. Los corazones carnales nada ven en el Señor Jesús como para interesarse en Él. ¡Sí, por cuántos de su pueblo sigue siendo despreciado y rechazado respecto de su doctrina y su autoridad! Experimentado en quebranto : Para ser nuestro perfecto Sumo Sacerdote, Cristo Jesús tenía que sufrir personalmente nuestro dolor. Este varón de dolores lo despreciaron y rechazaron los que estaban a su alrededor y hasta el día de hoy sucede lo mismo. Algunos lo rechazan porque se le oponen. Otros desprecian a Cristo y su gran don de perdón. ¿Usted lo rechaza, lo olvida o lo acepta? Dios celoso
4/1/2014
Dios celoso
Deuteronomio 7:1-11 Hay una advertencia estricta contra toda amistad y comunión con los ídolos y los idólatras. Los que están en comunión con Dios no deben participar con las obras infructuosas de las tinieblas. La limitación a las naciones aquí mencionadas de la orden de destruir, demuestra claramente que, después de mucho tiempo, no se tenía que tomar esto como precedente. La comprensión correcta de la maldad del pecado y del misterio del Salvador crucificado nos capacitará para entender la justicia de Dios en todos los castigos, temporales y eternos. Tenemos que enfrentar con decisión las concupiscencias que batallan contra nuestra alma: no les mostremos misericordia; mortifiquémolas, crucifiquémolas y destruyámolas por completo. ¿Cómo fue que Israel mereció ser escogida por sobre todas las naciones de aquella época? No fue por mérito de Israel, sino por la fidelidad de Dios a su promesa a los antepasados de Israel. De la misma manera que Dios escogió a Israel, hoy en día ha escogido a todos los creyentes para ser parte de su preciada posesión. De manera similar, no es por mérito propio que hemos llegado a la fe en Cristo. Más bien Dios nos escogió por su bondad y su gracia. |
AuthorEscrito Por La Pastora Trini Ildefonso Ministerio LRC Categories |