El hombre: polvo y como la hierba
8/12/2014
Salmos 103:14-22
Eterna Micericordia..... La Escritura dice mucho de la misericordia de Dios, y todos la hemos experimentado. El padre compadece a sus hijos que son débiles de conocimiento y les enseña; los compadece cuando son perversos y los soporta; los compadece cuando están enfermos y los consuela; los compadece cuando están caídos y les ayuda a levantarse; los compadece cuando han ofendido, y por su sometimiento, los perdona; los compadece cuando les hacen daño y los endereza: así compadece el Señor a quienes le temen. Considera la fragilidad de nuestros cuerpos y la necedad de nuestra alma, cuán poco podemos hacer, cuán poco podemos soportar; en todo eso se manifiesta su compasión. Nosotros somos frágiles, pero el cuidado de Dios es eterno. Demasiado a menudo miramos a Dios como Juez y dador de la ley, La Escritura dice mucho de la misericordia de Dios, y todos la hemos experimentado. El padre compadece a sus hijos que son débiles de conocimiento y les enseña; los compadece cuando son perversos y los soporta; los compadece cuando están enfermos y los consuela; los compadece cuando están caídos y les ayuda a levantarse; los compadece cuando han ofendido, y por su sometimiento, los perdona; los compadece cuando les hacen daño y los endereza: así compadece el Señor a quienes le temen. Véase por qué Él compadece. Considera la fragilidad de nuestros cuerpos y la necedad de nuestra alma, cuán poco podemos hacer, cuán poco podemos soportar; en todo eso se manifiesta su compasión. su compasión y preocupación por nosotros. Cuando Dios examina nuestras vidas, recuerda nuestra condición humana. Nuestras debilidades nunca deberían usarse como justificación para pecar. Su misericordia toma todo en cuenta. Dios le tratará con compasión, confíe en El. ¡Qué corta e incierta es la vida del hombre! La flor del jardín es corrientemente de mejor calidad y durará más por estar amparada por el muro del jardín y al cuidado del jardinero, pero la flor del campo, a la cual se compara aquí la vida, no sólo se marchita sola, sino que está expuesta a los fríos vientos y puede ser pisoteada por las bestias del campo. Así es el hombre. Dios considera esto y lo compadece; que considere esto. la misericordia de Dios es mejor que la vida, porque la sobrevivirá. Su justicia, la verdad de su promesa, serán para los hijos de los hijos que siguen las piadosas huellas de sus antepasados. Entonces les será preservada la misericordia. El que hizo todo, reina sobre todo, y hace ambas cosas por su poderosa palabra. Él dispone de todas las personas y de las cosas para su gloria. Hay un mundo de ángeles santos que están siempre alabándole. Todas sus obras le alaben. Hubieran sido nuestra delicia constante si no fuésemos criaturas caídas. Eso llegarán a ser en una medida si nacemos de Dios. Eso serán por siempre en el cielo; tampoco podemos ser perfectamente felices hasta que tengamos placer inagotable en la obediencia perfecta a la voluntad de nuestro Dios. Y que el sentimiento de cada corazón redimido sea: Bendice, alma mía, a Jehová. Todas las cosas en todo lugar deben alabar al Señor: ¡los ángeles (los poderosos y sus ejércitos celestiales) y sus obras! Alabar a Dios significa recordar todo lo que El ha hecho por nosotros (103.2), temerlo, obedecer sus mandamientos (103.17, 18) y hacer su voluntad (103.21). ¿Es su vida una alabanza al Señor? Comments are closed.
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AuthorEscrito Por La Pastora Trini Ildefonso Ministerio LRC Categories |