October 30th, 2013
10/31/2013
Vasija--Alfarero--Control
Jeremias 18:1-9 Jeremias visita la casa del alfarero a petición de Dios. Allí aprende que el alfarero rechaza de vez en cuando alguna vasija debido a su pobre calidad. Así actúa también Dios como soberano sobre el pueblo de Judá. Lo que el alfarero hace, depende de la calidad del barro; lo que hace Dios con su pueblo, depende de la forma como éste responde al llamado divino. El barro puede frustrar las intenciones del alfarero y obligarlo a rehacer la vasija. Lo mismo que la calidad del barro limita lo que el alfarero puede crear, de la calidad de la gente depende lo que Dios puede hacer con ella. Se echó a perder : Equivale a la misma palabra hebrea usada en el caso del cinto de lino en 13.7, donde se traduce como «podrido». El barro no satisfacía las intenciones del alfarero. Según le pareció mejor : Podía hacer algo distinto con el barro, pero no la vasija que había querido fabricar. El Señor limita su acción soberana según sea la respuesta del pueblo al llamado divino.Mientras Jeremías miraba el trabajo del alfarero, Dios les puso en su mente dos grandes verdades. Dios tiene autoridad y poder para formar y moldear reinos y naciones como le plazca. Puede disponer de nosotros como le plazca; y sería tan absurdo que nosotros disputáramos esto como que el barro discutiera con el alfarero. Sin embargo, siempre sigue reglas fijas de justicia y bondad. Cuando Dios viene en contra nosotros con juicios, podemos estar seguros que es por nuestros pecados, pero la conversión sincera del mal del pecado evita el mal del castigo a personas, familias y naciones. Obra o Fe?
10/31/2013
Obra o Fe?
Romanos 9:30-33 La acción electiva de Dios ha conducido, pues, a que en el nuevo pueblo de Dios se reúnan judíos y gentiles y a que este nuevo pueblo elegido sea una representación de la obra salvadora universal de Dios. Algunas veces somos como estas personas que intentaban guardar la Ley para estar a bien con Dios. Quizás pensemos que basta con asistir a la iglesia, ocuparnos en sus actividades, diezmar y ser buenas personas. Eso es lo que se espera, ¿no? Pero las palabras de Pablo nos sacuden. Pablo explica que el plan de Dios no es para los que tratan de ganar su favor siendo buenos; es para los que creen que nunca serán suficientemente buenos y por lo tanto tienen que depender de Dios. Solo si ponemos nuestra fe en lo que Cristo ha hecho, seremos salvos. Si lo hacemos, "nunca seremos avergonzados" ni defraudados. Los judíos tenían una meta loable: honrar a Dios. Sin embargo, optaron equivocadamente por una rígida y dolorosa obediencia a la Ley. Algunos se dedicaron más a la Ley que a Dios. Pensaban que si cumplían con la Ley, Dios tendrían que aceptarlos como su pueblo. Pero uno no puede obligar a Dios. Los judíos no vieron que sus Escrituras, el Antiguo Testamento, enseñaban que la salvación es por la fe y no mediante esfuerzos humanos. La "piedra de tropiezo" era Jesús. Los judíos no creían en El porque no llenaba sus expectativas en cuanto al Mesías. Algunas personas aún consideran a Jesús un tropiezo porque la salvación por la fe no tiene sentido para ellas. Por lo tanto, tratan de trazarse un camino a Dios o esperan que Cristo pase por alto sus defectos. Otros tropiezan con Jesús porque los valores de Cristo son opuestos a los del mundo. El espera humildad y muchos no están dispuestos a humillarse delante de El. Cristo demanda obediencia y muchos rechazan someterse a su autoridad. El Dios sobre todos
10/29/2013
El Dios sobre todos
Romanos 9:18-23 Pablo cita Exo_9:16, donde Dios dijo de antemano cómo usaría a Faraón para declarar el poder del Señor. Usa este argumento para demostrar que salvar era tarea de Dios y no del hombre. Dios castigó el pecado de Faraón endureciéndole el corazón, para confirmar su desobediencia, a fin de que las consecuencias de su rebelión fueran su propio castigo. Con esta ilustración, Pablo no dice que algunos somos más valiosos que otros, sino simplemente que el Creador controla todo lo creado. El objeto creado, sin embargo, no tiene el derecho de demandar cosa alguna de su Creador; su existencia depende de El. Al tener en cuenta esta perspectiva, se elimina cualquier tentación de enorgullecernos por logros personales. Pablo se anticipa a esta objeción común a lo que ha enseñado en el versículo anterior. Si Dios escoge tener misericordia de «quien él quiere» y endurecer el corazón a «quien él quiere» (v. 18), y si su decisión se basa en última instancia en su propia voluntad (v. 11), ¿entonces como puede ser considerado justo que Dios juzgue a aquellos que se nieguen a creer? En el NT la palabra se usa con frecuencia para referirse a la gracia de Cristo y como prueba de su benevolencia. La misericordia no es meramente una emoción pasiva, sino un deseo activo por eliminar las causas de la miseria de otros. Cuestionar la moralidad de las acciones de Dios es inadecuado. Las criaturas no tienen derecho a objetar lo que su Creador hace. Sin embargo, tales enseñanzas no deben conducirnos a pensar que los pecadores no pueden creer aunque lo quisieran, porque la Escritura no enseña eso. Ella afirma repetidamente que «todo aquel que invocare el nombre del Señor, será salvo» (10.13). Esta apelación de la Escritura a los incrédulos se mantiene tanto en el AT como en el NT (véanse Eze_33:11; Joh_6:37). Dios ejerce su soberanía con abundante misericordia, no con estricta justicia. Su sufrida paciencia con Israel prueba su deseo de salvar esa nación, y confirma el hecho de que el fracaso judío no es responsabilidad de Dios La misericordia de Dios también se evidencia en su trato con los gentiles . Como apoyo de la enseñanza que no todos los llamados a convertirse en «vasos de misericordia» (v. 23) pertenecen al pueblo de Israel. Pablo cita a Hos_2:23 y 1.10. En su contexto original, estos versículos se refieren a la restauración de Israel ante Dios. Pablo ve en ellos la inclusión de los gentiles (véase 1Pe_2:10), para indicar que existe un Israel espiritual (la Iglesia), más allá de la nación judía (véase Gal_6:16). October 24th, 2013
10/24/2013
Temor y Conocimiento
Proverbios 9:9-12 La sabiduría comienza cuando conocemos a Dios. Le da un propósito a la vida porque El la creó. Conocer a Dios no solo es saber datos sobre su persona, sino permanecer en temor reverente y tener comunión con El. ¿Quiere en verdad ser sabio? Conozca cada vez más a Dios. (Si desea más información sobre cómo llegar a ser sabio, véanse Jam_1:5; 2Pe_1:2.) Debemos evitar la compañía y los placeres necios del impío o nunca disfrutaremos los placeres de la vida santa. Es vano procurar la compañía de los impíos con la esperanza de hacerles bien; es mucho más probable que seamos corrompidos por ellos. No basta con abandonar al necio; debemos juntarnos con los que andan en sabiduría. No hay verdadera sabiduría, sino en el camino de la religión, no hay vida verdadera, sino al final de este camino. Aquí está la felicidad de quienes lo abrazan. El hombre no puede darle provecho a Dios; todo es para nuestro propio bien. Obsérvese la vergüenza y ruina de los que no lo respetan. Dios no es el Autor del pecado: y Satanás puede tentar solamente, no puede forzar. Tú llevarás la pérdida de aquello de que te burlaste: se agregará a tu condenación. La ayuda mutua
10/23/2013
La ayuda mutua
Galatas 6:1-10 Ningún cristiano debe pensar jamás que es totalmente independiente y que no necesita la ayuda de otros, y nadie debe pensar que ha sido excluido de la tarea de ayudar a otros. El cuerpo de Cristo, la Iglesia, funciona sólo cuando los miembros trabajan juntos por el bienestar común. ¿Conoce a alguien que necesita ayuda? ¿Hay algún hermano o hermana en Cristo que requiere corrección o ánimo? Humilde y gentilmente acérquese a esa persona (Joh_13:34-35). Cuando uno hace lo mejor, se siente satisfecho de los resultados y no necesita compararse con otros. Las personas hacen comparaciones por muchas razones. Algunos destacan las debilidades de otros a fin de sentirse mejor consigo mismo. Otros sencillamente quieren asegurarse que actúan bien. Cuando esté tentado a compararse, mire a Jesucristo. Su ejemplo lo inspirará a que haga las cosas mucho mejor, y su aceptación cariñosa le será de consuelo cuando no logre sus objetivos. Pablo insiste que cumplamos con nuestra responsabilidad de satisfacer las necesidades materiales de aquellos que nos enseñan (1Co_9:7-12). Es fácil recibir el beneficio de una buena enseñanza bíblica y admirar a nuestros líderes espirituales, pasando por alto sus necesidades financieras y físicas. Debemos cuidar de ellos, no de mala gana o con fastidio, sino con un espíritu generoso, como muestra de honor y aprecio por sus servicios (1Ti_5:17-18). Ciertamente sería sorprendente si usted plantara maíz y brotaran calabazas. Es una ley de la vida, tanto espiritual como física, que uno cosecha lo que siembra. Si uno chismea de sus amigos, los pierde. Cada acción tiene resultados. Si usted planta para sus propios deseos, cosechará lamentos y maldad. Si planta para agradar a Dios, cosechará gozo y vida eterna ¿Qué tipo de semillas está sembrando? Es desalentador hacer continuamente el bien y no recibir ninguna palabra de agradecimiento o ver resultados tangibles. Pablo desafió a los gálatas y nos desafía a nosotros a seguir haciendo lo bueno y confiar a Dios los resultados. A su tiempo, cosecharemos bendiciones. Estar preparado
10/22/2013
Estar preparado
Lucas 12:35-40 Los discípulos deben estar en vela y preparados para la venida de Jesús, cuya hora nadie conoce. Una imagen de tales disposiciones se halla en un criado que aguarda a su señor, que ha de volver de un banquete de bodas a alguna hora de la noche. Cuando llame el señor, deberá estar ya el criado a la puerta para abrir, dejar pasar y conducir al señor a su casa. Para esto está allí el criado y lleva la túnica recogida; como cuando se está de camino, se trabaja o se combate, tiene ceñida la cintura y sostiene en la mano una lámpara encendida. Si no llevase la túnica recogida no podría ir prontamente a la puerta, y si tuviera que ir primero a buscar la lámpara y encenderla, pondría de mal humor a su señor. Esto, aplicado al discípulo, significa que a cada momento debe estar equipado moralmente de tal forma que pueda inmediatamente acudir a la llamada del Señor cuando venga a juzgar, que debe ser claro y luminoso como el sol y sin tropiezo moral, cargado de frutos de justicia por Jesucristo. para gloria y alabanza de Dios. El discípulo que está pronto es felicitado, es llamado dichoso por Jesús. Entre dos bienaventuranzas se expresan los bienes que aguardan al siervo que está siempre en vela, incansable y fiel. El Señor le servirá a la mesa. Cambio completo de la situación: el siervo es señor, y el Señor es siervo. Dios hace participar de su gloria a los que velan. La gloria del reino de Dios se compara con frecuencia con un banquete de bodas, que Dios prepara para los que acoge en su reino. Dios honra a los invitados sirviéndolos y les da participación en su gloria. Si el discípulo de Cristo supiera exactamente cuándo va a venir el Señor, se prepararía para salirle al encuentro. Nosotros sabemos con seguridad que el Señor ha de venir, pero no sabemos cuándo. Hijos por promesa.
10/21/2013
Hijos por promesa.
Romanos 9:1-8El rechazo de los judíos por la dispensación del evangelio no quebrantó la promesa de Dios a los patriarcas. Las promesas y las advertencias se cumplirán. La gracia no corre por la sangre; ni los beneficios salvíficos se hallan siempre en los privilegios externos de la iglesia. No sólo fueron elegidos algunos de la simiente de Abraham, y otros no, sino que Dios obró conforme al consejo de su voluntad. Dios profetizó de Esaú y Jacob, nacidos en pecado, hijos de la ira por naturaleza, como los demás. Si eran dejados a sí mismos hubieran continuado en pecado durante toda la vida, pero, por razones santas y sabias, que no nos son dadas a conocer, Él se propuso cambiar el corazón de Jacob y dejar a Esaú en su maldad. Este caso de Esaú y Jacob ilumina la conducta divina con la raza caída del hombre. Toda la Escritura muestra la diferencia entre el cristiano confeso y el creyente real. Los privilegios externos son concedidos a muchos que no son los hijos de Dios. Sin embargo, hay un estímulo completo para el uso diligente de los medios de gracia que Dios ha determinado Pablo expresa su preocupación por sus "hermanos" judíos al decir que estaría dispuesto a recibir el castigo que a ellos corresponde si esto los salvara. Teniendo en mente que solo Cristo puede salvarnos, Pablo expresa una profundidad de amor rara. Como Jesús, estaba dispuesto a sacrificarse por otros. ¿Cuán preocupado está usted por los que no conocen a Cristo? ¿Está dispuesto a sacrificar tiempo, dinero, energías, comodidades y seguridad a fin de lograr que pongan su fe en Jesús? Los judíos del Antiguo Testamento veían la elección de Israel por Dios como una adopción. No merecían ni tenían derechos como hijos naturales. Aun así, Dios los adoptó y les otorgó la condición de hijos suyos. Las promesas del maravilloso pacto de Dios fueron para Abraham. Los del pacto, los verdaderos hijos de Abraham, no son solo sus descendientes biológicos, sino también los que confían en Dios y en lo que Cristo hizo por ellos. Más que vencedores
10/18/2013
Más que vencedores
Romanos 8:28-39 Dios hace posible que "todas las cosas", no solo incidentes aislados, redunden en nuestro bien. Esto no significa que todo lo que nos pasa es bueno. Lo malo sigue prevaleciendo en nuestro mundo caído, pero Dios es capaz de cambiar todas las circunstancias a nuestro favor. Tenga presente que Dios no está ocupado en hacernos felices, sino en cumplir sus propósitos. Note asimismo que esta promesa no es para todos. Es solo para los que aman a Dios y forman parte de los planes divinos. Los "llamados" son todas los que el Espíritu Santo convence y permite que reciban a Cristo. Estas personas tienen una nueva perspectiva, una nueva mentalidad en la vida. Confían en Dios, no en los tesoros de la vida; buscan su seguridad en el cielo, no en la tierra; aprenden a aceptar el dolor y la persecución, no a lamentarlos, porque Dios está con ellos. La meta suprema de Dios en cuanto a nosotros es hacernos semejantes a Cristo (1Jo_3:2). A medida que vamos siendo como El, descubrimos lo que en realidad somos, las personas para lo cual fuimos creados. ¿Cómo podemos ser conformados a la imagen de Cristo? Leyendo y prestando atención a la Palabra de Dios, estudiando su vida en la tierra a través de los Evangelios, llenándonos con el Espíritu Santo y haciendo la obra de Dios en la tierra.Dios en cuanto al hombre no fue producto de un pensamiento tardío, sino que se determinó antes de la fundación del mundo. La humanidad se creó para servir y glorificar a Dios. Si usted aceptó a Cristo, regocíjese porque Dios siempre lo ha conocido. Su amor es eterno. Su sabiduría y poder son supremos. El le guiará y le protegerá hasta el día en que llegue a su presencia. Llamó significa convocó o invitó. Si desea más información acerca de la justificación y la glorificación, véase el cuadro en el capítulo 3. ¿Cree que por no ser suficientemente bueno Dios no lo salvará? ¿Piensa o siente que la salvación es para todos menos para usted? Entonces estos versículos le vienen muy bien. Si Dios entregó a su Hijo por usted, ¡no va a quitarle la salvación! Si Cristo dio su vida por usted, ¡no va cambiar de opinión ni condenarlo! La epístola de Romanos, más que una explicación teológica de la gracia redentora de Dios, es una carta de consuelo y aliento dirigida a usted. Dios nos absolvió y quitó nuestro pecado y culpa; es Satanás, no Dios, el que nos acusa. Cuando esto sucede, Jesús es el abogado que está a la diestra de Dios para defendernos. Si desea más información acerca del concepto de que Cristo es nuestro intercesor, véase la nota a Heb_4:14; Heb_4:15. Estos versículos contienen una de las promesas más reconfortantes de todas las Escrituras. Los creyentes siempre han tenido que enfrentar dificultades de diversas formas: persecución, enfermedad, prisión, aun muerte. Esto podría hacerles creer que Cristo los había abandonado. Pero Pablo exclama que es imposible que algo nos separe de Cristo. Su muerte a nuestro favor es prueba de su amor inquebrantable. Nada impedirá su presencia constante con nosotros. Dios nos dice cuán grande es su amor para que nos sintamos bien seguros en El. Si tenemos esta seguridad sorprendente, no temeremos. October 16th, 2013
10/16/2013
Cuan Grande es Dios
2 Samuel 7:22-29 Este capítulo registra el pacto que hizo Dios con David, prometiéndole que continuaría la línea de David para siempre. Esta promesa se vio cumplida en su totalidad con el nacimiento de Cristo Jesús. Esta sección registra la oración de David en la que expresa su humilde aceptación de la promesa de Dios para extender su dinastía para siempre. David se dio cuenta de que estas bendiciones habían sido conferidas a él y a sus descendientes para que Israel también fuera bendecido. Ayudarían a cumplir el gran propósito de Dios, y sus promesas para toda la nación; y a la larga, para el mundo entero. Hoy dia esas promesas a la disposicion de todos los que confian plenamente en el creador del universo. Dios ha cumplido su pacto por medio de su hijo Jesucristo, su perdon y misericordia se extiende a lo largo de la historia para toda la humanidad sin limites. Si a este punto no te has apropiado de estas promesas puedes hacerlo y confiar plenamente en El, su fidelidad, amor y perdon, y su gracia te sostendra para siempre. October 11th, 2013
10/11/2013
Guiame
Salmos 143:6-11 David estaba perdiendo la esperanza, lo atrapaba un temor paralizante y una profunda depresión. En ocasiones, nos sentimos atrapados en una depresión que cada vez es más intensa y no podemos salir de ella. En esos momentos, podemos ir ante el Señor y, al igual que David, expresar nuestros verdaderos sentimientos. Entonces El nos ayudará a recordar sus obras (143.5), a alcanzarlo (143.6), a confiar en El (143.8) y a decidir hacer su voluntad (143.10). David oró que le enseñaran a hacer la voluntad de Dios, no la suya. Una oración por dirección se centra en uno mismo si no reconoce el poder que tiene Dios para volver a encauzar nuestras vidas. Pedir que Dios reestructure nuestras prioridades despierta la mente y aviva la voluntad. En sus mejores acciones el creyente no olvida que es un pecador. La meditación y la oración nos recobrarán de nuestros malestares; entonces, el alma que se lamenta lucha por regresar al Señor como el bebé estira sus manos a la madre indulgente, y tiene sed de sus consolaciones, como la tierra reseca de la lluvia refrescante. Mira a su alrededor y se fija en la obra de Dios. Mientras más consideremos el poder de Dios, menos temeremos el rostro o la fuerza del hombre. Alza sus ojos con fervientes deseos de Dios y de su favor. Este es el mejor rumbo que podemos tomar cuando nuestro espíritu está abrumado. |
AuthorEscrito Por La Pastora Trini Ildefonso Ministerio LRC Categories |