LUZ O TINIEBLAS?
11/25/2019
Juan 1:1-13
La razón más simple del por qué se llama Verbo al Hijo de Dios, parece ser, que como nuestras palabras explican nuestras ideas a los demás, así fue enviado el Hijo de Dios para revelar el pensamiento de Su Padre al mundo. Lo que dice el evangelista acerca de Cristo prueba que Él es Dios. Afirma su existencia en el comienzo; su coexistencia con el Padre. El Verbo estaba con Dios. Todas las cosas fueron hechas por Él, y no como instrumento. Sin Él nada de lo que ha sido hecho fue hecho, desde el ángel más elevado hasta el gusano más bajo. Esto muestra cuán bien calificado estaba para la obra de nuestra redención y salvación. La luz de la razón, y la vida de los sentidos, deriva de Él, y depende de Él. Este Verbo eterno, esta Luz verdadera resplandece, pero las tinieblas no la comprendieron. Oremos sin cesar que nuestros ojos sean abiertos para contemplar esta Luz, para que andemos en ella; y así seamos hechos sabios para salvación por fe en Jesucristo. Bendeciré a Jehová que me aconseja
11/22/2019
Salmo 16:1-11
Podemos identificarnos con los salmos pues expresan nuestros sentimientos. Todos enfrentamos problemas, como los salmistas cientos de años atrás, y con frecuencia reaccionamos como ellos lo hicieron. En el Salmo 3, David le dice a Dios cómo se siente acerca de las probabilidades en su contra. Pero luego de tres versículos, el rey se da cuenta de que la presencia y el cuidado de Dios anulaban las probabilidades. Esta experiencia se ve repetida en varios salmos. Por lo general, la esperanza y la confianza en Dios sobrepasan el temor y el sufrimiento, pero algunas veces no. Aun así, los salmistas derramaban sus pensamientos y emociones delante de Dios. Cuando se sentían abandonados por Dios, se lo decían. Cuando se sentían impacientes porque Dios tomaba mucho tiempo en contestar sus oraciones, se lo decían. Se sentían en libertad de ser hombres y sinceros con su Creador porque reconocían la diferencia entre ellos y Dios. Es por eso que tantos de los salmos sombríos terminan en la luz. ¡Los salmistas empezaban expresando sus sentimientos y terminaban recordando con quién estaba hablando! A pesar de que tenemos mucho en común con los salmistas, somos diferentes en dos sentidos: Puede que no le digamos a Dios lo que pensamos o sentimos y, por lo tanto, ¡tampoco reconocemos, ni siquiera vagamente, quién es el que escucha nuestras oraciones! Puede que su apreciación y su conocimiento de Dios crezcan en la medida que usted es sincero con El. LA VIDA Y EL BIEN, LA MUERTE Y EL MAL
11/21/2019
Deuteronomio 30:15-20
Todo hombre desea obtener vida y bienestar y escapar de la muerte y del mal; desea la felicidad y teme la desdicha. Tan grande es la compasión del Señor, que por su palabra ha favorecido a los hombres con el conocimiento del bien y del mal, que los haría por siempre felices si no fuera por su propia falta. Oigamos el resumen de todo el asunto. Si ellos y los suyos amaran a Dios y le sirvieran, vivirían y serían felices. Si ellos, o los suyos, se alejan de Dios, desertan de su servicio y adoran otros dioses, esto ciertamente será su ruina. Nunca hubo, desde la caída del hombre, más de un solo camino al cielo, el cual está marcado en ambos Testamentos, aunque no con igual claridad. Moisés se refería al mismo camino de aceptación que Pablo describió más claramente; y las palabras de Pablo se refieren a la misma obediencia de la cual trató más plenamente Moisés. En ambos Testamentos se nos acerca el camino bueno y recto y se nos ha revelado con claridad. Si oyereis hoy su voz,...
11/20/2019
Salmo 95:1-7
Cada vez que vamos a la presencia de Dios debemos ir con acción de gracias. El Señor debe ser alabado; no nos falta tema, y bueno sería que no nos faltase corazón. ¡Cuán grande es Dios, a quién pertenece toda la tierra y su plenitud, que dirige todo y dispone de todo! -El Señor Jesús a quien aquí se nos enseña a alabar, es Dios grande; el Dios omnipotente es uno de sus títulos, y Dios sobre todo, bendito por siempre. A Él se ha dado toda potestad en el cielo y en la tierra. Él es nuestro Dios y debemos alabarlo. Él es nuestro Salvador y autor de nuestra bendición. La iglesia del evangelio es su rebaño, Cristo es el gran buen pastor de los creyentes; Él los buscó cuando estaban perdidos y los trajo a su redil. Hebreos 4:1-10
Los privilegios que tenemos con el evangelio son más grandes que los que había bajo la ley de Moisés aunque en sustancia se predicó el mismo evangelio en ambos Testamentos. En todo tiempo ha habido muchos oyentes no aprovechados; y la incredulidad se halla en la raíz de toda esterilidad cuando se está bajo la palabra. La fe del que oye es la vida de la palabra. Una triste consecuencia del descuido parcial y de una profesión vacilante y relajada es que, a menudo, hace que los hombres no la alcancen. Entonces, pongamos diligencia para que tengamos una entrada clara al reino de Dios. Como Dios terminó su obra, y entonces descansó, hará que los que creen acaben su obra, y luego disfruten su reposo. Evidente es que resta un día de reposo para el pueblo de Dios, más espiritual y excelente que el del séptimo día, o aquel al cual Josué guió a los judíos. Este reposo es un reposo de gracia, consuelo y santidad en el estado del evangelio. Reposo en gloria es donde el pueblo de Dios disfrutará el fin de su fe y el objeto de todos sus deseos. El reposo, que es el tema del razonamiento del apóstol, y del cual, concluye que queda por ser disfrutado, es indudablemente el reposo celestial que queda para el pueblo de Dios y que se opone al estado de trabajos y trastorno de este mundo. Es el reposo que obtendrán cuando el Señor Jesús aparezca desde el cielo. Pero los que no creen nunca entrarán en este reposo espiritual, sea el de gracia aquí o el de gloria en el más allá. Dios siempre ha declarado que el reposo del hombre está en Él, y que su amor es la única dicha verdadera del alma; y la fe en sus promesas, por medio de su Hijo, es el único camino para entrar en aquel reposo. Efesios 1:15-23
Dios ha puesto bendiciones espirituales en su Hijo el Señor Jesús; pero nos pide que las busquemos y las obtengamos por la oración. Aun los mejores cristianos necesitan que se ore por ellos; y mientras sepamos del bienestar de los amigos cristianos debemos orar por ellos. Hasta los creyentes verdaderos tienen gran necesidad de sabiduría celestial. ¿Acaso aun los mejores de nosotros somos renuentes a uncirnos al yugo de Dios aunque no hay otro modo de hallar reposo para el alma? ¿Acaso no nos alejamos de nuestra paz por un poco de placer? Si discutiéramos menos y oráramos más con y por unos y otros, diariamente veríamos más y más cuál es la esperanza de nuestra vocación, y las riquezas de la gloria divina en esta herencia. Deseable es sentir el fuerte poder de la gracia divina que empieza y ejecuta la obra de la fe en nuestras almas. Pero cuesta mucho llevar a un alma a creer plenamente en Cristo y aventurarse toda ella y su esperanza de vida eterna en su justicia. Nada menos que el poder omnipotente obrará esto en nosotros. Aquí se significa que es Cristo el Salvador quien suple todas las necesidades de los que confían en Él, y les da todas las bendiciones en la más rica abundancia. Siendo partícipes en Cristo mismo llegamos a ser llenos con la plenitud de la gracia y la gloria en Él. Entonces, ¡cómo pueden olvidarse a sí mismos esos que andan buscando la justicia fuera de Él! Esto nos enseña a ir a Cristo. Si supiéramos a qué estamos llamados, qué podemos hallar en Él, con toda seguridad que iríamos y seríamos parte de Él. Cuando sentimos nuestra debilidad y el poder de nuestros enemigos, es cuando más notamos la grandeza de ese poder que efectúa la conversión del creyente y que está dedicado a perfeccionar su salvación. Ciertamente esto nos constreñirá por amor para vivir para la gloria de nuestro Redentor. Salmo 119:137-143
Dios nunca hizo, y nunca puede hacer, mal a nadie. Las promesas son fielmente cumplidas por el que las hizo. El celo contra el pecado debe constreñirnos a hacer lo que podamos en su contra; por lo menos, que hagamos más en la religión. Nuestro amor por la palabra de Dios es prueba de nuestro amor por Dios, porque está diseñada para hacernos partícipes de su santidad. La real excelencia de los hombres siempre los rebaja ante sus propios ojos. Cuando somos pequeños y despreciados tenemos más necesidad de recordar los preceptos de Dios, para que los tengamos como apoyo. La ley de Dios es la verdad, la norma de santidad, la regla de la felicidad, pero es sólo la obediencia de Cristo la que justifica al creyente. Las penas son a menudo la suerte de los santos en este valle de lágrimas; ellos están apesadumbrados por múltiples tentaciones. Hay delicias en la palabra de Dios que los santos disfrutan frecuente y dulcemente, cuando están en problemas y angustias. Esta es la vida eterna: conocer a Dios y a Jesucristo a quien Él envió, Juan xvii, 3. Vivamos aquí la vida de la fe y la gracia, y seamos llevados a la gloriosa vida en el más allá. LA LEY DE DIOS
11/12/2019
Deuteronomio 6:1-25
Cuando Dios liberto a su pueblo de la esclavitud del faraón de Egipto por medio de Moisés, estableció reglas Espirituales y humanitaria para que el pueblo supiera conducirse correctamente agradando a Dios y sin dañar a su prójimo. Pero como siempre la humanidad se empeña en hacer el mal, no todos los hombres se sometieron a los mandatos divinos, que se escribieron no solo para las personas de ese tiempo, sino que la palabra de Dios se escribió para todo aquel que atreves de los tiempos puede creer y aceptar las promesas de Dios. Hoy día podemos escoger si creer o no creer y vivir según lo que hemos creído. EL DÍA DEL SEÑOR Jesús
11/6/2019
2 Corintios 1:12-14
Aunque como pecador el apóstol sólo podía regocijarse y gloriarse en Cristo Jesús, como creyente podía regocijarse y gloriarse en ser realmente lo que confesaba. La conciencia atestigua acerca del curso y tenor constantes de la vida. Por eso, podemos juzgarnos y no por este o aquel acto aislado. Nuestra conversación será bien ordenada, cuando vivamos y actuemos bajo el principio de la gracia en el corazón. Teniendo esto, podemos dejar nuestros caracteres en las manos del Señor, pero usando los medios apropiados para aclararlos, cuando el mérito del evangelio o nuestra utilidad, así lo exija. EL DIA DEL SENOR #2
11/5/2019
1 Corintios 5:1-8
.El apóstol nota un abuso flagrante, ante el cual los corintios hacían la vista gorda. El espíritu festivo y la falsa noción de la libertad cristiana parecen haber salvado al hechor de la censura. Sin duda es penoso que a veces, los que profesan el evangelio cometan delitos de los cuales se avergonzarían hasta los paganos. El orgullo espiritual y las falsas doctrinas tienden a introducir y a diseminar tales escándalos. ¡Cuán temibles son los efectos del pecado! El diablo reina donde Cristo no reina. El hombre está en el reino y bajo el poder de Satanás cuando no está en Cristo. El mal ejemplo de un hombre influyente es muy dañino: se disemina por todas partes. Los principios y ejemplos corruptos dañan a toda la iglesia si no se corrigen. Los creyentes deben tener nuevos corazones y llevar vidas nuevas. La conversación corriente de ellos y sus obras religiosas deben ser santas. Tan lejos está el sacrificio de Cristo, nuestra Pascua, por nosotros de hacer innecesaria la santidad personal y la pública, que da poderosas razones y motivos para ella. Sin santidad no podemos vivir por fe en Él, ni unirnos a sus ordenanzas con consuelo y provecho. |
AuthorEscrito Por La Pastora Trini Ildefonso Ministerio LRC Categories |