Ofrenda que duele
11/11/2013
Ofrenda que duele
Genesis 22:1-13 Dios probó a Abraham, no para hacerlo tropezar y caer, sino para incrementar la capacidad de Abraham de obedecer a Dios, y así desarrollar su carácter. De la misma manera que el fuego refina al mineral para extraer metales preciosos, Dios nos refina por medio de circunstancias difíciles. Cuando somos probados nos podemos quejar, o podemos tratar de ver cómo Dios nos está forzando para forjar nuestro carácter. Aquella mañana siguiente Abraham comenzó uno de los actos de obediencia más grandes registrados en la historia. Viajó 80 km hasta el monte Moriah cerca de Jerusalén. Con los años había aprendido lecciones muy duras acerca de la importancia de obedecer a Dios. Esta vez obedeció en forma rápida y total. A menudo obedecer a Dios es una lucha, porque puede significar que le entreguemos algo que verdaderamente amamos. No siempre debemos esperar que nuestra obediencia a Dios sea fácil ni que venga en forma natural. No sabemos cómo Abraham llevó el fuego. Tal vez llevó un carbón encendido o un pedernal para encender el fuego. ¿Por qué le pidió Dios a Abraham que hiciera un sacrificio humano? Las naciones paganas practicaban los sacrificios humanos, pero Dios mismo los condenaba como un terrible pecado (Lev_20:1-5). Dios no quería la muerte física de Isaac, pero quería que Abraham sacrificara en su corazón a Isaac para que se convenciera de que amaba más a Dios que a su hijo prometido y largamente esperado. En realidad, Dios estaba probando a Abraham. El propósito de las pruebas es fortalecer nuestro carácter e incrementar nuestra consagración a Dios y su agenda. A través de esta experiencia difícil, Abraham aprendió sobre su compromiso de obedecer a Dios. También aprendió sobre la habilidad de Dios para resolver. Es difícil soltar lo que amamos profundamente. ¿Qué podría ser más apropiado que amar al único hijo? Aun entonces, cuando le damos a Dios lo que El nos pide, nos devuelve mucho más de lo que nosotros pudiésemos haber soñado. Los beneficios espirituales de sus bendiciones superan enormemente nuestros sacrificios. ¿Ha dejado usted de entregarle a Dios su amor, sus hijos o su tiempo? Confíe en que El proveerá (22.8). Comments are closed.
|
AuthorEscrito Por La Pastora Trini Ildefonso Ministerio LRC Categories |