La venida del Señor
10/17/2023
1Tesalonisenses 4
La venida del Señor 13 Tampoco queremos, hermanos, que ignoréis acerca de los que duermen, para que no os entristezcáis como los otros que no tienen esperanza. 14 Porque si creemos que Jesús murió y resucitó, así también traerá Dios con Jesús a los que durmieron en él. 15 Por lo cual os decimos esto en palabra del Señor: que nosotros que vivimos, que habremos quedado hasta la venida del Señor, no precederemos a los que durmieron. 16 Porque el Señor mismo con voz de mando, con voz de arcángel, y con trompeta de Dios, descenderá del cielo; y los muertos en Cristo resucitarán primero. 17 Luego nosotros los que vivimos, los que hayamos quedado, seremos arrebatados juntamente con ellos en las nubes para recibir al Señor en el aire, y así estaremos siempre con el Señor. 18 Por tanto, alentaos los unos a los otros con estas palabras. Aquí hay consuelo para los parientes y amigos de los que mueren en el Señor. La pena por la muerte de amigos es lícita; podemos llorar nuestra propia pérdida, aunque sea ganancia para ellos. El cristianismo no prohíbe nuestros afectos naturales y la gracia no los elimina. Pero no debemos exagerar nuestros pesares; esto es demasiado parecido a los que no tienen esperanza de una vida mejor. La muerte es desconocida y poco sabemos del estado después de morir, pero las doctrinas de la resurrección y de la segunda venida de Cristo son remedio contra el temor a la muerte, y contra la pena indebida por la muerte de nuestros amigos cristianos; tenemos la plena seguridad de estas doctrinas. Será felicidad que todos los santos se junten y permanezcan juntos para siempre, pero la dicha principal del cielo es estar con el Señor, verle, vivir con Él, y gozar de Él para siempre. Debemos apoyarnos unos a otros en los momentos de tristeza; sin mortificar los espíritus unos a otros ni debilitarnos las manos de unos y otros. Esto puede hacerse porque hay muchas lecciones que aprender sobre la resurrección de los muertos y la segunda venida de Cristo. ¡Qué consuelo para el hombre cuando se le diga que va a comparecer ante el trono del juicio de Dios! ¿Quién puede ser consolado con estas palabras? Sólo el hombre a cuyo espíritu da testimonio Dios que sus pecados han sido borrados y los pensamientos de su corazón son purificados por el Espíritu Santo, de modo que puede amar a Dios y magnificar dignamente su nombre. No estamos en estado seguro a menos que esto sea así en nosotros o que deseemos que así sea. ESTAS LISTO?
10/12/2023
Apocalipsis 19:1-9
Alabanzas en el cielo 19 Después de esto oí una gran voz de gran multitud en el cielo, que decía: ¡Aleluya! Salvación y honra y gloria y poder son del Señor Dios nuestro; 2 porque sus juicios son verdaderos y justos; pues ha juzgado a la gran ramera que ha corrompido a la tierra con su fornicación, y ha vengado la sangre de sus siervos de la mano de ella. 3 Otra vez dijeron: ¡Aleluya! Y el humo de ella sube por los siglos de los siglos. 4 Y los veinticuatro ancianos y los cuatro seres vivientes se postraron en tierra y adoraron a Dios, que estaba sentado en el trono, y decían: ¡Amén! ¡Aleluya! 5 Y salió del trono una voz que decía: Alabad a nuestro Dios todos sus siervos, y los que le teméis, así pequeños como grandes. 6 Y oí como la voz de una gran multitud, como el estruendo de muchas aguas, y como la voz de grandes truenos, que decía: ¡Aleluya, porque el Señor nuestro Dios Todopoderoso reina! 7 Gocémonos y alegrémonos y démosle gloria; porque han llegado las bodas del Cordero, y su esposa se ha preparado. 8 Y a ella se le ha concedido que se vista de lino fino, limpio y resplandeciente; porque el lino fino es las acciones justas de los santos. La cena de las bodas del Cordero 9 Y el ángel me dijo: Escribe: Bienaventurados los que son llamados a la cena de las bodas del Cordero. Y me dijo: Estas son palabras verdaderas de Dios. 10 Yo me postré a sus pies para adorarle. Y él me dijo: Mira, no lo hagas; yo soy consiervo tuyo, y de tus hermanos que retienen el testimonio de Jesús. Adora a Dios; porque el testimonio de Jesús es el espíritu de la profecía. Alabar a Dios por lo que tenemos es orar por lo que aún va a hacer por nosotros. Hay armonía entre los ángeles y los santos en este cántico triunfal. Cristo es el Esposo de su Iglesia rescatada. Esta segunda unión será completada en el cielo, pero el comienzo del milenio glorioso (por el cual se significa el reino de Cristo, o estado de dicha por mil años en la tierra) puede ser considerado como la celebración de sus esponsales en la tierra. Entonces, la Iglesia de Cristo, purificada de errores, divisiones y corrupciones de doctrina, disciplina, adoración y práctica, estará preparada para ser públicamente reconocida por Él como su delicia y su amada. La Iglesia apareció, no con el vestido alegre e impúdico de la madre de las prostitutas, sino con lino fino, limpio y blanco. Son las vestiduras de la justicia de Cristo, imputada para justificación e impartida para santificación. Las promesas del evangelio, los dichos verdaderos de Dios, abiertas, aplicadas y selladas por el Espíritu de Dios, en santas ordenanzas, son el festejo nupcial. Esto parece referirse a la abundante gracia y consuelo que recibirán los cristianos en los dichosos días que tienen que venir. El apóstol ofreció honores al ángel, que los rechazó. Dirigió al apóstol al único objeto verdadero de adoración religiosa: adora a Dios y a Él solo. Esto condena claramente la práctica de los que adoran los elementos del pan y del vino, y santos, y ángeles, y los que no creen que Cristo es verdaderamente, y por naturaleza, Dios, pero le rinden una suerte de adoración. Son reos de idolatría por un mensajero del cielo. Estos son los verdaderos dichos de Dios; del que debe ser adorado como uno con el Padre y el Espíritu Santo. Jesús, la vid verdadera
10/10/2023
Juan 15: 1-17
1 Yo soy la vid verdadera, y mi Padre es el labrador. 2 Todo pámpano que en mí no lleva fruto, lo quitará; y todo aquel que lleva fruto, lo limpiará, para que lleve más fruto. 3 Ya vosotros estáis limpios por la palabra que os he hablado. 4 Permaneced en mí, y yo en vosotros. Como el pámpano no puede llevar fruto por sí mismo, si no permanece en la vid, así tampoco vosotros, si no permanecéis en mí. 5 Yo soy la vid, vosotros los pámpanos; el que permanece en mí, y yo en él, este lleva mucho fruto; porque separados de mí nada podéis hacer. 6 El que en mí no permanece, será echado fuera como pámpano, y se secará; y los recogen, y los echan en el fuego, y arden. 7 Si permanecéis en mí, y mis palabras permanecen en vosotros, pedid todo lo que queréis, y os será hecho. 8 En esto es glorificado mi Padre, en que llevéis mucho fruto, y seáis así mis discípulos. 9 Como el Padre me ha amado, así también yo os he amado; permaneced en mi amor. 10 Si guardareis mis mandamientos, permaneceréis en mi amor; así como yo he guardado los mandamientos de mi Padre, y permanezco en su amor. 11 Estas cosas os he hablado, para que mi gozo esté en vosotros, y vuestro gozo sea cumplido. 12 Este es mi mandamiento: Que os améis unos a otros, como yo os he amado. 13 Nadie tiene mayor amor que este, que uno ponga su vida por sus amigos. 14 Vosotros sois mis amigos, si hacéis lo que yo os mando. 15 Ya no os llamaré siervos, porque el siervo no sabe lo que hace su señor; pero os he llamado amigos, porque todas las cosas que oí de mi Padre, os las he dado a conocer. 16 No me elegisteis vosotros a mí, sino que yo os elegí a vosotros, y os he puesto para que vayáis y llevéis fruto, y vuestro fruto permanezca; para que todo lo que pidiereis al Padre en mi nombre, él os lo dé. 17 Esto os mando: Que os améis unos a otros. Jesucristo es la Vid, la Vid verdadera. La unión de la naturaleza divina con la humana, y la plenitud del Espíritu que hay en Él, recuerdan la raíz de la vida que fructifica por la humedad de la buena tierra. Los creyentes son los pámpanos de esta Vid. La raíz no se ve y nuestra vida está escondida con Cristo; la raíz sustenta al árbol, le difunde la savia, y en Cristo están todos los sustentos y provisiones. Los pámpanos de la vid son muchos, pero al unificarse en la raíz no son sino una sola vid; de este modo, todos los cristianos verdaderos, aunque disten entre sí en cuanto a lugar y opinión, se unen en Cristo. Los creyentes, como los pámpanos de la vid, son débiles e incapaces de permanecer, sino como nacieron. El Padre es el Dueño de la vid. Nunca hubo un dueño tan sabio, tan cuidadoso con su viña como Dios por su Iglesia que, por eso, debe prosperar. Debemos ser fructíferos. Esperamos uvas de una vid, y del cristiano esperamos un temperamento, una disposición y una vida cristiana. Debemos honrar a Dios y hacer el bien, esto es, llevar fruto. Los estériles son cortados. Hasta las ramas fructíferas necesitan poda, porque, en el mejor de los casos, tenemos ideas, pasiones y humores que requieren ser quitados, cosa que Cristo ha prometido hacer por su palabra, Espíritu y providencia. Si se usan medios drásticos para avanzar la santificación de los creyentes, ellos estarán agradecidos por ellos. La palabra de Cristo se da a todos los creyentes; y hay en esa palabra una virtud que limpia al obrar la gracia y deshacer la corrupción. Mientras más fruto demos, más abundaremos en lo que es bueno, y más glorificado será nuestro Señor. Para fructificar debemos permanecer en Cristo, debemos estar unidos a Él por la fe. El gran interés de todos los discípulos de Cristo es mantener constante la dependencia de Cristo y la comunión con Él. Los cristianos verdaderos hallan, por experiencia, que toda interrupción del ejercicio de su fe hace que mengüen los afectos santos, revivan sus corrupciones y languidezcan sus consolaciones. Los que no permanecen en Cristo, aunque florezcan por un tiempo en la profesión externa, llegan, no obstante, a nada. El fuego es el lugar más adecuado para las ramas marchitas; no son buenas para otra cosa. Procuremos vivir más simplemente de la plenitud de Cristo, y crecer más fructíferos en todo buen decir y hacer, para que sea pleno nuestro gozo en Él y en su salvación. Aquellos a quienes Dios ama como Padre pueden despreciar el odio de todo el mundo. Como el Padre amó a Cristo que fue digno hasta lo sumo, así amó a sus discípulos, que eran indignos. Todos los que aman al Salvador deben perseverar en su amor por Él, y aprovechar todas las ocasiones para demostrarlo. El gozo del hipócrita dura sólo un momento, pero el gozo de los que permanecen en Cristo es una fiesta continua. Tienen que demostrar su amor por Él obedeciendo sus mandamientos. Si el mismo poder que primero derramó el amor de Cristo en nuestros corazones, no nos mantuviera en ese amor, no permaneceríamos en ese amor por mucho tiempo. El amor de Cristo por nosotros debe llevarnos a amarnos mutuamente. Él habla como si estuviera por encargar muchas cosas, pero nombra sólo a esta: abarca muchos deberes. OPORTUNIDAD UNICA
10/9/2023
Jan 5:1-19
El paralítico de Betesda 1 Después de estas cosas había una fiesta de los judíos, y subió Jesús a Jerusalén. 2 Y hay en Jerusalén, cerca de la puerta de las ovejas, un estanque, llamado en hebreo Betesda, el cual tiene cinco pórticos. 3 En estos yacía una multitud de enfermos, ciegos, cojos y paralíticos, que esperaban el movimiento del agua. 4 Porque un ángel descendía de tiempo en tiempo al estanque, y agitaba el agua; y el que primero descendía al estanque después del movimiento del agua, quedaba sano de cualquier enfermedad que tuviese. 5 Y había allí un hombre que hacía treinta y ocho años que estaba enfermo. 6 Cuando Jesús lo vio acostado, y supo que llevaba ya mucho tiempo así, le dijo: ¿Quieres ser sano? 7 Señor, le respondió el enfermo, no tengo quien me meta en el estanque cuando se agita el agua; y entre tanto que yo voy, otro desciende antes que yo. 8 Jesús le dijo: Levántate, toma tu lecho, y anda. 9 Y al instante aquel hombre fue sanado, y tomó su lecho, y anduvo. Y era día de reposo aquel día. 10 Entonces los judíos dijeron a aquel que había sido sanado: Es día de reposo; no te es lícito llevar tu lecho. 11 Él les respondió: El que me sanó, él mismo me dijo: Toma tu lecho y anda. 12 Entonces le preguntaron: ¿Quién es el que te dijo: Toma tu lecho y anda? 13 Y el que había sido sanado no sabía quién fuese, porque Jesús se había apartado de la gente que estaba en aquel lugar. 14 Después le halló Jesús en el templo, y le dijo: Mira, has sido sanado; no peques más, para que no te venga alguna cosa peor. 15 El hombre se fue, y dio aviso a los judíos, que Jesús era el que le había sanado. 16 Y por esta causa los judíos perseguían a Jesús, y procuraban matarle, porque hacía estas cosas en el día de reposo. 17 Y Jesús les respondió: Mi Padre hasta ahora trabaja, y yo trabajo. 18 Por esto los judíos aún más procuraban matarle, porque no solo quebrantaba el día de reposo, sino que también decía que Dios era su propio Padre, haciéndose igual a Dios. Por naturaleza todos somos impotentes en materias espirituales, ciegos, cojos y marchitos; pero la provisión plena para nuestra curación está hecha, si atendemos a ella. Un ángel bajaba y revolvía el agua, que curaba cualquier enfermedad, pero se beneficiaba sólo aquel que era el primero en entrar al agua. Esto nos enseña a ser cuidadosos para que no dejemos escapar una ocasión que no puede regresar. El hombre había perdido el uso de sus extremidades hacía treinta y ocho años. ¿Nos quejaremos de una noche fatigosa, nosotros que, tal vez por muchos años, apenas hemos sabido lo que es estar enfermo por un día, cuando muchos otros, mejores que nosotros, apenas han sabido qué es estar bien un día? -Cristo apartó a éste de los demás. Los que llevan mucho tiempo afligidos, pueden consolarse con que Dios lleva la cuenta del tiempo transcurrido. Nótese que este hombre habla de la falta de amabilidad de los que lo rodean, sin reflejar enojo. Así como debemos ser agradecidos, también debemos ser pacientes. Nuestro Señor Jesús lo sana, aunque él no lo pidió ni lo pensó. Levántate y anda. La orden de Dios: Vuelve y vive; Hazte un nuevo corazón, no presupone en nosotros más poder sin la gracia de Dios, su gracia que distingue, de lo que esta orden supuso poder en el hombre incapacitado: fue por el poder de Cristo y Él debe tener toda la gloria. ¡Qué sorpresa gozosa para el pobre inválido hallarse repentinamente tan bien, tan fuerte, tan capaz de ayudarse a sí mismo! La prueba de la sanidad espiritual es que nos levantamos y caminamos. Si Cristo ha sanado nuestras dolencias espirituales, vamos donde nos mande y llevemos lo que Él nos imponga, y andemos delante de Él. Los aliviados del castigo del pecado corren el peligro de volver a pecar cuando se terminan el terror y la restricción, a menos que la gracia divina seque la fuente de su pecado. La miseria desde la cual son hechos íntegros los creyentes, nos advierte que no pequemos más, habiendo sentido el aguijón del pecado. Esta es la voz de cada providencia: Vete y no peques más. Cristo vio que era necesario dar esta advertencia, porque es frecuente que la gente prometa mucho cuando está enferma; y cuando están recién sanados, cumplen sólo algo , pero después de un tiempo, olvidan todo. Cristo habla de la ira venidera, la cual supera la comparación con las muchas horas, sí, con las semanas y años de dolor que tienen que sufrir algunos hombres impíos, como consecuencia de sus indulgencias ilícitas, y si tales aflicciones son severas, ¡cuán temible será el castigo eterno del impío! TODO ES VANIDADD
10/5/2023
Eclesiastés 12 12 Acuérdate de tu Creador en los días de tu juventud, antes que vengan los días malos, y lleguen los años de los cuales digas: No tengo en ellos contentamiento; 2 antes que se oscurezca el sol, y la luz, y la luna y las estrellas, y vuelvan las nubes tras la lluvia; 3 cuando temblarán los guardas de la casa, y se encorvarán los hombres fuertes, y cesarán las muelas porque han disminuido, y se oscurecerán los que miran por las ventanas; 4 y las puertas de afuera se cerrarán, por lo bajo del ruido de la muela; cuando se levantará a la voz del ave, y todas las hijas del canto serán abatidas; 5 cuando también temerán de lo que es alto, y habrá terrores en el camino; y florecerá el almendro, y la langosta será una carga, y se perderá el apetito; porque el hombre va a su morada eterna, y los endechadores andarán alrededor por las calles; 6 antes que la cadena de plata se quiebre, y se rompa el cuenco de oro, y el cántaro se quiebre junto a la fuente, y la rueda sea rota sobre el pozo; 7 y el polvo vuelva a la tierra, como era, y el espíritu vuelva a Dios que lo dio. 8 Vanidad de vanidades, dijo el Predicador, todo es vanidad. Resumen del deber del hombre 9 Y cuanto más sabio fue el Predicador, tanto más enseñó sabiduría al pueblo; e hizo escuchar, e hizo escudriñar, y compuso muchos proverbios. 10 Procuró el Predicador hallar palabras agradables, y escribir rectamente palabras de verdad. 11 Las palabras de los sabios son como aguijones; y como clavos hincados son las de los maestros de las congregaciones, dadas por un Pastor. 12 Ahora, hijo mío, a más de esto, sé amonestado. No hay fin de hacer muchos libros; y el mucho estudio es fatiga de la carne. 13 El fin de todo el discurso oído es este: Teme a Dios, y guarda sus mandamientos; porque esto es el todo del hombre. 14 Porque Dios traerá toda obra a juicio, juntamente con toda cosa encubierta, sea buena o sea mala. Debemos acordarnos de los pecados cometidos contra nuestro Creador, arrepentirnos, y pedir perdón. Debemos recordar nuestro deber y afrontarlo, buscando en Él la gracia y el poder. Esto debe hacerse temprano, mientras el cuerpo es fuerte y el espíritu activo. Cuando el hombre siente dolor al revisar una vida malgastada, de no haber abandonado el pecado ni las vanidades del mundo hasta que se ve obligado a decir: yo no tengo en ellos contentamiento, su sinceridad se vuelve muy cuestionable. Luego, sigue una descripción figurada de la vejez y sus dolencias, la cual tiene ciertas dificultades, pero el significado es claro: mostrar cuán incómodos son, por lo general, los días de la vejez. Como los cuatro versículos, 2-5, son una descripción figurativa de las enfermedades que habitualmente acompañan a la vejez, así, el versículo 6, comenta las circunstancias que acompañan la hora de la muerte. Si el pecado no hubiera entrado al mundo, no se hubieran conocidos estas enfermedades. Ciertamente, entonces, el viejo debiera reflexionar en el mal del pecado. Salomón repite su texto: VANIDAD DE VANIDADES, TODO ES VANIDAD. Estas son las palabras de uno que podía hablar por propia y cara experiencia de la vanidad del mundo, que nada puede hacer para aliviar a los hombres de la carga del pecado. Al considerar el valor de las almas, presta buena atención a lo que dijo y escribió: palabras de verdad que siempre serán palabras aceptables. Las verdades de Dios son como aguijones para quienes son torpes y alejados; y clavos para los que andan descarriados y desviados; medios de estabilizar al corazón a fin de que nunca nos apartemos de nuestro deber ni seamos quitados de este. El Pastor de Israel es el Dador de la sabiduría inspirada. Todos los maestros y los guías reciben sus comunicaciones. El título se aplica en la Escritura al Señor Jesucristo, el Hijo de Dios. Los profetas inquirieron y diligentemente indagaron qué persona y qué tiempo, indicaba el Espíritu de Cristo que estaba en ellos, cuando anunciaron de antemano los sufrimientos de Cristo, y las glorias que vendrían tras ellos. Escribir muchos libros no era adecuado para la corta vida humana, y sería cansancio para el escritor y el lector; entonces era mucho más para ambos de lo que es ahora. Todas las cosas serían vanidad y aflicción, a menos que condujesen a esta conclusión: temer a Dios y obedecer sus mandamientos es el todo del hombre. El temor de Dios incluye en sí todos los afectos del alma, los que son producidos por el Espíritu Santo. Puede haber terror donde no hay amor, sí, donde hay odio. Pero esto es diferente del gracioso temor de Dios, como los sentimientos de un niño afectuoso. A menudo se pone en el corazón el temor de Dios como el todo de la religión verdadera, lo que comprende sus resultados prácticos en la vida. Atendamos a lo único necesario y, ahora, vayamos a Él como Salvador misericordioso, que pronto vendrá como Juez todopoderoso, cuando saque a la luz las cosas de las tinieblas y exponga los consejos de todos los corazones. ¿Por qué Dios registra en su palabra que TODO ES VANIDAD sino para impedir que nos engañemos para nuestra ruina? Él hace que nuestro deber sea nuestro interés. Que se grabe en nuestros corazones: Teme a Dios y guarda sus mandamientos porque esto es el todo del hombre. Amonestaciones de la sabiduría
9/26/2023
Amonestaciones de la sabiduría
Proverbios 12:9_19 Oye, hijo mío, la instrucción de tu padre, Y no desprecies la dirección de tu madre; 9 Porque adorno de gracia serán a tu cabeza, Y collares a tu cuello. 10 Hijo mío, si los pecadores te quisieren engañar, No consientas. 11 Si dijeren: Ven con nosotros; Pongamos asechanzas para derramar sangre, Acechemos sin motivo al inocente; 12 Los tragaremos vivos como el Seol, Y enteros, como los que caen en un abismo; 13 Hallaremos riquezas de toda clase, Llenaremos nuestras casas de despojos; 14 Echa tu suerte entre nosotros; Tengamos todos una bolsa. 15 Hijo mío, no andes en camino con ellos. Aparta tu pie de sus veredas, 16 Porque sus pies corren hacia el mal, Y van presurosos a derramar sangre. 17 Porque en vano se tenderá la red Ante los ojos de toda ave; 18 Pero ellos a su propia sangre ponen asechanzas, Y a sus almas tienden lazo. 19 Tales son las sendas de todo el que es dado a la codicia, La cual quita la vida de sus poseedores. La gente mala ejerce celo para seducir a los demás llevándolos a las sendas del destructor; los pecadores aman la compañía para pecar. Pero tienen tanto más por qué responder. ¡Cuán cautelosa debe ser la gente joven! 4; 32 “No consientas”. No digas como ellos dicen, ni hagas como ellos hacen o quisieran que hicieras; no tengas comunión con ellos. -¡Quién podría pensar que es un placer para un hombre destruir a otro! Nótese que su idea de riqueza mundana que no es ni de peso ni preciosa. Es el error destructor de miles que sobrevaloran la riqueza de este mundo. Los hombres se prometen en vano que el pecado resultará ventajoso para ellos. El camino del pecado es cuesta abajo; los hombres no pueden detenerse a sí mismos. Que la gente joven quisiera rehusar la ruina temporal y la eterna; que ellos rehusen dar un paso en las sendas destructoras. La avaricia que los hombres tienen por ganar los apresura a cosas que no tolerarán que ellos ni otros vivan la mitad de sus vidas. ¿Qué le aprovecha al hombre si gana el mundo y pierde su vida? Mucho menos si pierde su alma? Estad firmes en la libertad
9/22/2023
Galatas 5:
1 Estad, pues, firmes en la libertad con que Cristo nos hizo libres, y no estéis otra vez sujetos al yugo de esclavitud. 2 He aquí, yo Pablo os digo que si os circuncidáis, de nada os aprovechará Cristo. 3 Y otra vez testifico a todo hombre que se circuncida, que está obligado a guardar toda la ley. 4 De Cristo os desligasteis, los que por la ley os justificáis; de la gracia habéis caído. 5 Pues nosotros por el Espíritu aguardamos por fe la esperanza de la justicia; 6 porque en Cristo Jesús ni la circuncisión vale algo, ni la incircuncisión, sino la fe que obra por el amor. 7 Vosotros corríais bien; ¿quién os estorbó para no obedecer a la verdad? 8 Esta persuasión no procede de aquel que os llama. 9 Un poco de levadura leuda toda la masa. 10 Yo confío respecto de vosotros en el Señor, que no pensaréis de otro modo; mas el que os perturba llevará la sentencia, quienquiera que sea. 11 Y yo, hermanos, si aún predico la circuncisión, ¿por qué padezco persecución todavía? En tal caso se ha quitado el tropiezo de la cruz. 12 ¡Ojalá se mutilasen los que os perturban! 13 Porque vosotros, hermanos, a libertad fuisteis llamados; solamente que no uséis la libertad como ocasión para la carne, sino servíos por amor los unos a los otros. 14 Porque toda la ley en esta sola palabra se cumple: Amarás a tu prójimo como a ti mismo. 15 Pero si os mordéis y os coméis unos a otros, mirad que también no os consumáis unos a otros. Cristo no será el Salvador de nadie que no lo reciba y confíe en Él como su único Salvador. Prestemos oído a las advertencias y las exhortaciones del apóstol a estar firmes en la doctrina y la libertad del evangelio. Todos los cristianos verdaderos que son enseñados por el Espíritu Santo, esperan la vida eterna, la recompensa de la justicia, y el objeto de su esperanza, como dádiva de Dios por fe en Cristo; y no por amor de sus propias obras. El convertido judío puede observar las ceremonias o afirmar su libertad, el gentil puede desecharlas o participar en ellas, siempre y cuando no dependa de ellas. Ningún privilegio o profesión externo servirá para ser aceptos de Dios sin la fe sincera en nuestro Señor Jesús. La fe verdadera es una gracia activa; obra por amor a Dios y a nuestros hermanos. Que estemos en el número de aquellos que, por el Espíritu, aguardan la esperanza de justicia por la fe. El peligro de antes no estaba en cosas sin importancia en sí, como ahora son muchas formas y observancias. Pero sin la fe que obra por el amor, todo lo demás carece de valor, y comparado con ello las otras cosas son de escaso valor. AGRADECER EN TODO TIEMPO
9/15/2023
Salmos 100 Exhortación a la gratitud Salmo de alabanza. 1 Cantad alegres a Dios, habitantes de toda la tierra. 2 Servid a Jehová con alegría; Venid ante su presencia con regocijo. 3 Reconoced que Jehová es Dios; Él nos hizo, y no nosotros a nosotros mismos; Pueblo suyo somos, y ovejas de su prado. 4 Entrad por sus puertas con acción de gracias, Por sus atrios con alabanza; Alabadle, bendecid su nombre. 5 Porque Jehová es bueno; para siempre es su misericordia, Y su verdad por todas las generaciones. Dios es nuestro Creador y no nosotros. Mucha gente vive como si fuera el creador y el centro de su pequeño mundo. Esta mentalidad los lleva a una ávida ambición y, si se les quita todo, a perder toda esperanza. Sin embargo, cuando nos damos cuenta de que Dios nos creó y nos da todo lo que tenemos, queremos dar a otros conforme Dios nos ha dado (2Co 9:8). Entonces, si todo se pierde, seguiremos teniendo a Dios y todo lo que El nos da. 100.4 Solo Dios es digno de alabanza. ¿Cuál es su actitud hacia la adoración? ¿Va con gozo ante la presencia de Dios o lo hace mecánicamente o de mala gana? Este salmo nos dice que recordemos la bondad de Dios y su fidelidad, ¡y luego lo adoremos con acción de gracias y alabanza! La misericordia de Dios
9/10/2023
Salmos 36
Al músico principal. Salmo de David, siervo de Jehová. 1 La iniquidad del impío me dice al corazón: No hay temor de Dios delante de sus ojos.7 2 Se lisonjea, por tanto, en sus propios ojos, De que su iniquidad no será hallada y aborrecida. 3 Las palabras de su boca son iniquidad y fraude; Ha dejado de ser cuerdo y de hacer el bien. 4 Medita maldad sobre su cama; Está en camino no bueno, El mal no aborrece. 5 Jehová, hasta los cielos llega tu misericordia, Y tu fidelidad alcanza hasta las nubes. 6 Tu justicia es como los montes de Dios, Tus juicios, abismo grande. Oh Jehová, al hombre y al animal conservas. 7 ¡Cuán preciosa, oh Dios, es tu misericordia! Por eso los hijos de los hombres se amparan bajo la sombra de tus alas. 8 Serán completamente saciados de la grosura de tu casa, Y tú los abrevarás del torrente de tus delicias. 9 Porque contigo está el manantial de la vida; En tu luz veremos la luz. 10 Extiende tu misericordia a los que te conocen, Y tu justicia a los rectos de corazón. 11 No venga pie de soberbia contra mí, Y mano de impíos no me mueva. 12 Allí cayeron los hacedores de iniquidad; Fueron derribados, y no podrán levantarse. Los hombres pueden cerrar su compasión, pero en Dios hallaremos misericordia. Este es gran consuelo para todo creyente, que se verá claramente, para no ser quitado. Dios hace todo sabiamente y bien, pero ahora no sabemos qué hace; en el más allá hay tiempo suficiente para saber. La amorosa bondad de Dios es preciosa para los santos. Ellos se ponen bajo su protección y, entonces, están seguros y a salvo. Las almas bondadosas, aunque aún desean más de Dios, nunca desean más que Dios. Los dones de la Providencia hasta aquí los satisfacen, y están contentos con las cosas que tienen. El beneficio de las santas ordenanzas es dulce para un alma santificada y fortaleza para la vida espiritual y divina. Pero la satisfacción total está reservada para el estado futuro. Sus goces serán constantes. Dios no sólo obra en ellos el deseo gracioso de esos placeres sino que, por su Espíritu, llena su alma con gozo y paz al creer. Él vivifica a quien quiere; y quienquiera desee puede venir y tomar de Él gratuitamente las aguas vivas. Conozcamos, amemos y sirvamos justamente al Señor; entonces, ningún enemigo orgulloso, de la tierra o del infierno, nos separará de su amor. La fe llama a las cosas que no son como si fueran. Nos lleva adelante al final del tiempo; nos muestra al Señor en su trono de juicio; el imperio del pecado caído para nunca más levantarse. guiados por la palabra
9/3/2023
Romanos 12:12
Deberes cristianos 1 Así que, hermanos, os ruego por las misericordias de Dios, que presentéis vuestros cuerpos en sacrificio vivo, santo, agradable a Dios, que es vuestro culto racional. 2 No os conforméis a este siglo, sino transformaos por medio de la renovación de vuestro entendimiento, para que comprobéis cuál sea la buena voluntad de Dios, agradable y perfecta. Habiendo terminado el apóstol la parte de su carta en que argumenta y prueba diversas doctrinas que son aplicadas prácticamente, aquí plantea deberes importantes a partir de los principios del evangelio. Él ruega a los romanos, como hermanos en Cristo, que por las misericordias de Dios presenten sus cuerpos en sacrificio vivo a Él. Este es un poderoso llamado. Recibimos diariamente del Señor los frutos de su misericordia. Presentémonos; todo lo que somos, todo lo que tenemos, todo lo que hacemos, porque después de todo, ¿qué tanto es en comparación con las grandes riquezas que recibimos? Es aceptable a Dios: un culto racional, por el cual somos capaces y estamos preparados para dar razón, y lo entendemos. La conversión y la santificación son la renovación de la mente; cambio, no de la sustancia, sino de las cualidades del alma. El progreso en la santificación, morir más y más al pecado, y vivir más y más para la justicia, es llevar a cabo esta obra renovadora, hasta que es perfeccionada en la gloria. El gran enemigo de esta renovación es conformarse a este mundo. Cuidaos de formaros planes para la felicidad, como si estuviera en las cosas de este mundo, que pronto pasan. No caigáis en las costumbres de los que andan en las lujurias de la carne, y se preocupan de las cosas terrenales. La obra del Espíritu Santo empieza, primero, en el entendimiento y se efectúa en la voluntad, los afectos y la conversación, hasta que hay un cambio de todo el hombre a la semejanza de Dios, en el conocimiento, la justicia y la santidad de la verdad. Así, pues, ser piadoso es presentarnos a Dios. |
AuthorEscrito Por La Pastora Trini Ildefonso Ministerio LRC Categories |